viernes, 8 de febrero de 2019

OPORTUNIDAD PERDIDA


Pues lo siento, pero no comulgo con el triunfalismo que se le pretende dar por las distintas autoridades de Guadalajara que, al parecer, estuvieron por FITUR.
El sábado día 26 de enero estuve dándome una vuelta por la Feria Internacional del Turismo, casi con el único interés de conocer el stand de mí Comunidad que, a fin de cuenta, es lo que más me interesa. Pues bien, después de pasarme por los pabellones 3, 5, 7 y 9, donde estaban los stands de las distintas CCAA, no encontré el de Castilla la Mancha, disponía de muy poco tiempo y era básicamente por el que tenía interés, y muy particularmente por lo relativo a Guadalajara, mi provincia. 
Cuando en el pabellón 3, ya me iba a salir del ferial y pregunté en un puesto de información, me confirmaron que estaba en el pabellón 7. Por fin pude ver CASTILLA-LEÓN y fijándome bien, detrás pude ver CASTILLA LA MANCHA. Me atrevería a calificar de “el deprimente CASTILLA LA MANCHA”.
La primera provincia con la que me encontré fue Guadalajara, que era lo que yo buscaba. Se me cayó el alma a los pies. Había un mostrador que no creo que llegara ni a los dos metros de longitud, lleno de folletos informativos de distintos Ayuntamientos, donde la gente amontonada, por falta de sitio, cogía distinta información que constantemente reponían tres personas (un hombre y dos mujeres jóvenes) situados en la parte de adentro del mostrador.
Se leía GUADALAJARA, en letras más bien de tamaño pequeño, no tenían sitio físico para poner letras de tamaño mayor, y también se decía algo relativo a la Diputación. De la comunidad lo único que, sospeché, era el cartel, en semicírculo para englobar las cinco provincias.
Cuando a una de las señoritas le dije que como alcarreño sentía vergüenza de que en la feria más importante de turismo se diera tan ridícula imagen: había una foto (las he visto mucho mejores de las que publican los particulares en Facebook) de lavanda en flor, que según esta señorita representaba a Brihuega; un trozo de pared de pizarra representando la Arquitectura Negra; unos árboles, eso me dijeron, de plástico acaramelado, que parecían luces de Navidad, que, por lo visto, representaban el Hayedo de la Tejera Negra. No tenían ni sitio para poner una foto del Hayedo; en algún sitio también se leía algo sobre Don Quijote de la Mancha (en particular, sobre esto de Don Quijote, la señorita comentó algo como que tenían instrucciones de promocionarlo en las cinco provincias de la Comunidad). ¡Ah! En el exterior del stand, una señorita repartía nuestro periódico en papel LA NUEVA ALCARRIA.
Ni rastro de El Parque Natural del Alto Tajo; el cañón del Río Dulce; la Hoz del Río Salado en Santamera; la Arquitectura Románica del norte de Guadalajara, el Ocejón, El Alto Rey, los castillos de Guadalajara; pueblos medievales, como Sigüenza (con su Catedral en Año Jubilar), Atienza, Molina de Aragón, Pastrana, Hita, Trillo, Cifuentes, etc., y lo que más me dolió en el alma: El Camino de El Cid. Me parecía mentira que la única (a lo mejor por ser la única) provincia de la Comunidad que forma parte del Consorcio Camino del Cid, a nivel de Diputación, que me parece que están haciendo una labor encomiable, como Consorcio, promocionando paisajes y pueblos de zonas deprimidas, se vea renegada de esta forma tan miserable ¿En qué se gastarán los dineros? (vaya pregunta más tonta que me hago). Después se lamentarán (bueno ellos no, no creo que les importe demasiado), de la huida de las gentes, sobre todo los jóvenes, hacia las ciudades, dejando muchos pueblos desiertos. Ni mención a la gastronomía; ni mención a la riqueza arqueológica de la provincia. Las gentes, a poco que “les tiras de la lengua”, hablan maravillas, del paisaje y los rincones de la provincia; ahora, los que tienen alguna responsabilidad, te sueltan cuatro chorradas de lo mucho que están trabajando, de lo mucho que se ha crecido y más que se va a crecer, cuatro cifras millonarias que te ciegan los ojos, se hacen unas fotos, salen en los medios y a vender postureo.
En fin, lamentable, o por lo menos, eso es lo que me pareció a mí. Trató de darme alguna explicación otra señorita, o señora, cuando pregunté por qué no había algún producto característico de la alcarria y me dijo que la representación empresarial estaba detrás y me llevo “al muro de las lamentaciones”, AREA EMPRESARIAL la llamaban ellas, pareciera que la querían esconder: cuatro estantes, divididos en cinco tramos verticales, uno para cada provincia, eso sí, por orden alfabético, donde había algunos folletos de distintas empresas. Hice una foto con una persona mirando con algún interés y una pareja que pasaba cuando intencionadamente hice la foto.
Creo que en todas las demás Comunidades había alguna atracción, con folclore y vestidos tradicionales, invadiendo espacios, incluso comunes, por donde a duras penas se podía pasar, con enormes colas para degustar algún producto de la tierra. En nuestra Guadalajara, salvo los dos metros de mostrador, donde la gente incluso tenía que meter la mano desde una segunda y tercera fila para alcanzar a coger algún folleto de los distintos Ayuntamientos, lo que demuestra que interés sí que hay, lo demás, de pena.
Ahora llegará la fiesta de las “águedas”, la botarga (ejemplo: Arbancón), los carnavales, etc., se vestirán con sus trajes tradicionales, orgullosos de ello y cada pueblo será capaz de montarse su fiestón, estirando sus bolsillos y el “bolsillo” de los Ayuntamientos, donde seguramente habrá abundancia de público; seguro que no faltará algún grupo de gente mayor con sus guitarras y sus laudes (rondallas) y se cantarán alguna jotilla. ¡Qué bien hubieran quedado en FITUR!